Japanese Cotton Cheesecake
1/05/2022
Confieso que no me gustan las tartas de queso horneadas, me resultan siempre muy pesadas, y prefiero las tartas sin horno con base de galleta, pero esta tarta de queso japonesa que tiene alma Obregón en uno de sus recetarios es lo más.
La tarta de queso japonesa se prepara como un soufflé, por lo que tiene una textura suave y aireada en boca que parece nube de algodón.
Es deliciosa y fácil de hacer aunque tengo que reconocer que pese a haberla realizado siguiendo varias recetas en las que los cambios eran mínimos, me ha sido imposible siempre que la superficie del pastel me quedara lisa. 🤷🏼♀️
Tarta de queso japonesa
Japanese Cotton Cheesecake
Cheescake Soufflé
Ingredientes
3 Huevos
150 g de queso crema
25 g de mantequilla
50 ml de leche
30 g de harina
15 g de maicena
¼ de crémor tártaro
75 g de azúcar
1/2 cdta de vainilla
Para decorar:
Azúcar glas
Elaboración
Precalentar el horno a 160ºC y meter dentro el recipiente (sin agua) en donde luego vayamos a meter nuestra tarta para hacerla al baño maría.
Engrasar un molde de 20 cm de diámetro . Alma forra tanto las paredes como la base con papel pero yo prefiero engrasarlo, también utiliza un molde desmontable pero yo lo hago en un molde cerrado.
Separar las claras de las yemas de tres huevos y reservar
Poner en un cazo a fuego lento el queso crema junto con la mantequilla y la leche en un cazo y remover hasta tener una mezcla homogénea.
Tamizar la harina y la maizena y fuera del fuego incorporarlo a la mezcla de queso, añadirle las yemas de huevo y mezclar muy bien batiendo enérgicamente. Reservar
Pasar un paño con un poco de alcohol en el bol de la batidora para quitarle cualquier resto de grasa. Poner las claras con el cremor tártaro y batir. Cuando empiecen a montar incorporar poco a poco el azúcar, añadir la vainilla y seguir batiendo hasta obtener un merengue firme
A la mezcla de queso que teníamos reservado ponerle una cucharada de las claras montadas para equiparar consistencias y después verter está preparación sobre las claras mezclando con movimiento envolvente para que no se bajen y quede una mezcla aireada. Verterlo el molde de la tarta.
Poner a hervir agua y cuando esté lista colocar la tarta en el centro del recipiente que tenemos metido en el horno desde el principio, echarle el agua hirviendo hasta cubrir la mitad del molde de la tarta y hornear de 40 a 50 minutos hasta que se doren la superficie
Pasado ese tiempo, sacarla del horno y del baño maría y dejar enfriar a temperatura ambiente. Meter en la nevera al menos 4 horas para desmoldar.
Transcurrido el tiempo y como mi molde es cerrado pongo sobre la tarta papel de hornear y un plato y le doy la vuelta como si fuera una tortilla. Una vez boca abajo coloco el plato de presentación y la vuelvo a dar la vuelta. Retiro el plato y el papel de hornear y decoro con azúcar glass
Esta receta pertenece al reto del mes de diciembre de Cooking the Chef dedicado a Alma Obregón. Puedes ver el resto de recetas participantes aquí
5 Comentarios
Tengo muchísimas ganas de hacer esta receta!! Espero que me salga la mitad de bien que a tí
ResponderEliminarjolín que ricura!! me encanta la textura de esta tarta...dan ganas de darle un mordisco!
ResponderEliminarEn casa somos unos enamorados de las tartas de queso japonesas por lo que has dado en el clavo. Si están bien hechas son maravillosas. Esta tuya tiene una pinta genial.
ResponderEliminarMe encantan las tartas de queso aunque suelo hacerlas en frio para ahorrar el tiempo de horno.
ResponderEliminarEsta tiene una pinta estupenda y seguro que estaba buenísima. bss desde Asturias
Qué Bonita, esta tarta japonesa.
ResponderEliminarMuchas gracias de nuevo.