Bambas de nata
1/05/2022Es probablemente mi dulce favorito, nunca las había hecho y ha sido muy satisfactorio poder recrear un sabor de mi infancia en casa.
El origen de la Bamba es Sueco. Si, sueco. En 1541, se popularizó en Suecia el consumo de un dulce relleno de pasta de almendras y desde entonces el último martes antes de la Cuaresma, el "Fettisdagen” (nuestro martes de carnaval), es tradición que se tome este dulce que en Suecia se conoce como semla (pl. semlor ) o fettisdagsbulle (pan del Fettisdagen)
Este bollo sobrepasó fronteras y se hizo famoso en toda Europa, en donde puede encontrarse en pastelerías durante todo el año. En el sur de Suecia y la Finlandia de habla sueca se lo conoce como fastlagsbulle; en Estonia vastlakukkel; en Noruega y Dinamarca fastelavnsbolle; en Islandia se conoce como Bolla y en las Islas Feroe se llaman Føstulávintsbolli . El cómo ha llegado a nosotros con el nombre de Bamba o Cristina seguro que es cosa de la idiosincrasia de los españoles.
El Semla original va aromatizado con cardamomo, suele ir relleno de pasta de almendras o mazapán y cubierto de nata montada, hoy en día está tan popularizado que los hay hasta de nutella creo que con igual “deliciosidad”.
A España llegó como una masa sencilla de harina, azúcar y mantequilla rellena de nata o crema que en algunos lugares hacen con leche y en otros con agua
Ahí va la receta de este bollo tan maravilloso y fácil, así que no hay excusas
Bambas de nata
Ingredientes
Para el prefermento
40 g de leche o agua**
4 g de levadura seca de panadero
64 g de harina de fuerza
**la cantidad es relativa ya que cada harina es capaz de absorber cantidades de líquido distintas. El resultado del prefermento debe ser una masa blanda a la que se le pueda hacer una bola por lo que si es necesario, agregar más leche o agua
Para los bollos
El prefermento anterior
100 g de harina de todo uso
100 g de harina de fuerza
50 g de azúcar
1/2 cda de miel
65 g de leche o agua
1 huevo
40 g de mantequilla en pomada
Preparación
La noche antes (o 3 horas antes) preparar el prefermento: mezclar todos los ingredientes y dejar tapado en un lugar fresco de la cocina (a temperatura ambiente con 3 horas es suficiente).
La noche antes (o 3 horas antes) preparar el prefermento: mezclar todos los ingredientes y dejar tapado en un lugar fresco de la cocina (a temperatura ambiente con 3 horas es suficiente).
Sacar también la mantequilla para que el día siguiente este blanda
En la amasadora, con el accesorio de la "Pala", poner todos los ingredientes excepto la mantequilla y mezclar hasta que todo quede homogéneo ,
Cambiar la pala por el gancho y amasa a velocidad lenta 4 ó 5 minutos.
Sin dejar de batir, añadir la mantequilla que deberá estar blanda en pequeñas porciones y amasar hasta obtener una masa brillante y lisa.
Untar con un poco de aceite de girasol la mesa y volcar la masa, plegar sobre si misma varias veces, hacer una bola y poner en un bol engrasado y dejar fermentar tapado hasta que doble su tamaño.
Volcar en la mesa sobre la mesa pincelada con aceite neutro, desgasificar suavemente apretando con los dedos y hacer porciones de 80 g más o menos.
Preparar la bandeja de horno con papel vegetal o tapete de silicona.
Plegar sobre si misma cada pedazo de masa, bolear e ir colocándolas en la bandeja.
Tapar para que no se sequen y dejar fermentar un par de horas
En este punto hay quienes pintan la superficie de cada bollito con huevo, yo no lo he hecho.
Meter al horno hasta que se doren 20 minutos.
Dejar enfriar completamente
Cortar al medio, rellenar de nata y espolvorear con azúcar glass
Esta receta pertenece al reto del mes de diciembre de Cooking the Chef dedicado a Alma Obregón..
Puedes ver el resto de recetas participantes aquí
9 Comentarios
Ummm, a mí también me lleva a la infancia, era de los pocos postres que me compraba, tan esponjosos!! Te han quedado de 10
ResponderEliminarMe has transportado a mi infancia y he vuelto a oler y recordar el sabor de esas bambas de nata que me compraban mis padres en una pastelería de la calle Bravo Murillo en Madrid. Eran deliciosas porque tenían una nata riquísima, de esas que saben de verdad.
ResponderEliminarUn abrazo y feliz año,
Elena
¡Que pinta ! Me encantan estas bombas de nata, se ven muy ricas. Feliz año. Bs.
ResponderEliminarQue ricas las bambas de nata, me las guardo.
ResponderEliminarBss
Menuda pinta tienen tus bambas tan rellenitas de nata, están estupendas!!
ResponderEliminarun besito
Me da igual estar hasta el cuello de dulces navideños. Una de estas bambas de nata me comía yo ahora mismo. Me vuelven loca las bambas de nata. Feliz año, Gloria.
ResponderEliminarSi tú supieras que el 99% de los dulces te hago los regalo.... A la próxima te llamo.
EliminarFeliz año también para ti Belén
Que ricas, hace años que no como una bamba, mira que hago dulces pero estas no las hice nunca. bss desde Asturias
ResponderEliminarQuerida Gloria,
ResponderEliminarCómo te dije cuando nos mandaste la receta, este es también un recuerdo infantil mio. Pasé 7 años viviendo en Madrid, y era una de mis meriendas favoritas. Cuando llegué a Barcelona, buscaba bambas por todas partes y no las descubrí... jajajaja también lo que hay aquí son los suizos, que es el bollo de la bamba sin nata.
Me encanta como siempre tu vital y jovial participación. Besos